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denomina horizontes . Los 3 horizontes principales son el
horizonte C que es el más cercano a la roca madre del cual se
formó el suelo. En el horizonte B ya existe cierto intemperismo,
es común encontrar minerales mezclados con materia orgánica.
El horizonte A, es la capa fértil del suelo.
Los factores que determinan la composición del suelo son: La
roca madre, el clima, el tiempo de exposición, el relieve y la
actividad biológica. La roca basal determina el tipo de suelo en
presencia. Así un suelo originado de la intemperización de
granito es distinto de uno de caliza. Sin embargo, éste no es el
único factor ya que se pueden formar diferentes suelos sobre
rocas idénticas si el clima es distinto en las dos zonas. Otro
factor que desempeña un papel importante es el relieve . Entre
más acentuado sea el relieve, el suelo es más suceptible a la
erosión. Otra causa significativa en la formación de un suelo es
el paso del tiempo. Se puede tener en 2 laderas contiguas, la
misma roca madre, el mismo clima, un relieve similar y sin
embargo existen 2 tipos de suelos diferentes. Un suelo que
comenzó a formarse recientemente, difiere de otro que lleva
miles de años. Por último, la actividad biológica influye sobre el
tipo de suelo. Los suelos de un bosque de pinos son distintos a
los suelos de la selva tropical y que los de un pántano. (Leet y
Judson, 1977).
Cuando el suelo presenta grandes concentraciones de algún
elemento como la sal, la flora presenta respuestas adaptativas
muy interesantes. Estas plantas denominadas halófitas
facultativas requieren mayor cantidad de energra para extraer
sales. Los manglares son comunidades halófitas que son refugio
de aves, crustáceos y moluscos.
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