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1-5.- Antenas
Para que se lleve a cabo el enlace en un sistema abierto de
comunicación, se utilizan antenas las cuales se conectan al transmisor y
al receptor por medio de líneas de transmisión. Las antenas son los
dispositivos capaces de convertir la energía eléctrica en energía
electromagnética y también pueden realizar el proceso inverso; de aquí se
desprende el principio de reciprocidad que establece que la antena se
puede usar para transmitir o para recibir, tomando como base los
siguientes conceptos: frecuencia de resonancia, ancho de banda,
impedancia, directividad y ganancia.
En función del patrón de radiación, las antenas se pueden
clasificar como omnidireccionales y direccionales. Dependiendo de la
función que realicen, también se pueden clasificar como antenas
transmisoras o como receptoras.
En relación con las antenas transmisoras, otro factor que se debe
considerar, es la potencia de radiación, que puede ser desde unos cuantos
watts hasta varios cientos de kilowatts. Es importante mencionar que si
en un sistema de comunicación, la potencia de salida del transmisor
excede los 100 watts, se requiere la autorización de la SCT para hacer
uso de alguna frecuencia del espectro electromagnético.
Figura 1-14.- Antena receptora tipo logarítmica.
