El subrayado es nuestro, y expresa cómo aún hoy en muchas zonas rurales, como en la Huasteca, el
proceso electoral no es el principal mecanismo de participación polltico, sino la comunidad
Abundando en la idea anterior Juan Manuel Ramfrez Sainz enumera por su parte cuatro aspectos que
se suman a la critica de la ubicación del concepto de cultura polUica: El primero consiste en considerar
que la politica no se reduce a la dominación y a la lucha por el poder mediante prácticas que suponen
los procesos electorales ya que existen otros medios de acción politica mediante los cuales se
logra una politización de lo social. El segundo, relativo a la concepción de cultura política
presupone el equilibrio y aceptación del sistema y excluye los que llevan al conflicto, la
resistencia
y
la búsqueda de cambios al mismo. El tercero la educación para la participación en
la vida política
y
en las contiendas electorales no se realiza de manera individual, como
corresponde a la noción del ciudadano, sino de manera colectiva. El cuarto considera que las
elecciones en tanto una v¡a o instrumento para la designación o selección de los gobernantes,
mientras que la democracia es una forma de convivencia palltica y vida social en la que el
conjunto de la sociedad toma parte en las decisiones fundamentales . Sin embargo, el ámbito de
lo cívico es más amplio que el electoral, por tanto, las acciones civilistas poseen un espectro
político mayor que el electoral (Ramirez, 1994).99
Otras criticas se dirigen contra los estudios marcadamente conducluales de cultura polltica, es decir,
aquellos que se centran en las eleCCiones (participación, preferencia de voto, expectativas, etCétera),
más que sobre otros lemas.
tOO
Un tercer orden de criticas, desde la perspectiva marxista, indicó las insuficiencias para ubicar a los
encuestados en la estructura social.
101
Un cuarto grupo de criticas se refiere al énfasis en lo homogéneo propio de centros urbanos, por lo
tanto que descuidaban tas especificidades regionales
102
(Craig-Cornelius, 1980: Segovia , 1972).
~
Desde esta perspectl ....a puede ptmsarse en una gran cantidad de grupoS que no necesariamente muestran una participación
politlca formal, sino que participan con mecanismos informales Pueden entrar grupos de mujeres. grupos étnicos. grupos de
¡ó....enes, grupos de campesinos. grupos de trabajadores, etcétera.
lOO
Isabel Flores considera que esta ....ertiente no ha sido tan fructifera como era de esperarse, ya que: "no han podído
comprobar con certeza, hasta ahora, una correspondencia de las actitudes con el comportamiento. durabilidad, consistencia
Interna, Integración con otras creencias, o una relación segura con el comportamiento polrtico de la población. Más aun, se
presentan problemas de fondo· (,cómo podemos inferir. a partir de indicadores superficiales como actitudes políticas y
creenc.ias. las estructuras profundas especificas que subyacen a una cuHura politica? ¿Cómo explicar las ....ariaciones
Sincrónicas
y
diacrónicas que en ellas se presentanT (Flores,
1994
Citada por Castillo
y
Patino,
1997).
tOt
Desde la lectura de intelectuales marxistas se critica la incapaCidad de los estudios pioneros de Almond y Verba para
inlerpretar datos en términos de la estructura de clases De manera similar se encuentran las debilidades del análiSIS de los
norteamerICanos para referirse a problemas de estratificaCión y diferenCiaCión social de sociedades particulares
101
Rafael Sego....ta
La
politüación
del
n;"'o mexicano SI conSidera los aspectos de carácter regional, en su estudio contempló:
Nue ....o l eón, Guadalajara, Distrito Federal, Estado de MéXICO, Tabasco
y
Qaxaca. Se90....ia. Ralael,
(1972).
La
politización
del
n''''o
mexicano.
FCE, México
162