Caracleriwcióll climática, energética
y
ambiental
Alteraciones climáticas
en la ciudad de México
La ciudad de México ha sido, desde sus inicios,
el centro político, económico, comercial y cultu–
ral más importante del país, y por ello, un polo
de atracción humana. Sin embargo, el fenóme–
no de inmigración y concentración se ha inten–
sificado en forma considerable en los últimos
años, rebasando las capacidades estructurales y
funcionales de la ciudad.
Esta gran concentración ha modificado el me–
dio ambiente natural, provocando alteraciones
importantes a su ecosistema, que evidentemente
han repercutido en el hombre mismo, en su sa–
lud, en su confort e incluso en su economía.
Dentro de estas alteraciones los cambios cli–
matológicos se hacen notar más claramente en la
temperatura, la precipitación pluvial y la hume–
dad. Existen otros elementos que han sufrido
modificaciones, sin embargo, son más difíciles
de identificar, calificar y cuantificar. Entre éstos
se encuentra la insolación, los vientos generales
y convectivos, etcétera.
Existen muchos factores que intervienen en la
alteración climática de una ciudad; los principa–
les son:
• La transformación de grandes cantidades
de energía en calor. Cran parte de la energía
eléctrica, mecánica, química, bioquúnica,
ete., utilizada en los procesos de produc–
ción, transformación, combustión y casi to–
das las actividades humanas, se transforma
en energía calorífica.
• La
disminución de áreas verdes y el aumen–
to de áreas pavimentadas y construidas.
Los árboles y las plantas en general son
excelentes elementos de control climático,
tanto de temperatura, humedad y vien tos;
sin ellos la radiación solar incide directa–
mente sobre las superficies expuestas e in–
crementa su temperatura.
• Las diferencias de absorción y reflexión
de los distintos materiales constructivos y
urbanos en general. Algunos materiales
absorben grandes cantidades de calor
mientras que otros lo reflejan en mayor pro-
porción; esto provoca diferentes comporta–
mientos térmicos y de presión atmosférica
a lo largo de la superficie urbana.
• La rápida eliminación de la precipitación plu–
vial a través de los sistemas de drenaje. El
entubamiento de ríos y escurrimientos na–
turales, así como la rápida captación pluvial
a través ele los sistemas de drenaje altera las
condiciones higrotérmicas de la ciudad.
• La impermeabilidad de los pavimentos, la
pérdida de la recarga freática, además de
alterar las características mecánicas del te–
rreno, afecta a los elementos vegetales y a la
humedad superficial del suelo.
• La
gran cantidad de partículas y gases con–
taminantes presentes en la atmósfera. Las
partículas contaminantes en suspensión
captan gran parte de la radiación solar, ca–
lentándose y calentando elaire circundante,
lo cual da como resultado
lm
aumento en la
temperatura.
La
insolación disminuye con–
siderablemente ya que la radiación solar
llega principalmente en forma difusa,
y
es
difícil que la temperatura acumulada se di–
sipe, ya que la capa de partículas y gases
contaminantes producen el efecto inverna–
dero. La precipitación pluvial aumenta en
función de los índices de contaminación
porque las partículas contaminantes consti–
tuyen núcleos higroscópicos alrededor de
los cuales se condensa la humedad, con lo
que alcanza un volumen suficiente para
precipitarse (A. Carda, 1975). Además, los
gases contaminantes al mezclarse con las
partículas de agua contenidas en el aire pro–
ducen lluvia ácida.
Temperatura
En la ciudad de México, en los últimos 57 años
la temperatura se ha incrementado gradualmen–
te. Aplicando una regresión lineal de primer
grado a los datos reales de temperatura media
anual obtenemos que en 1941 la temperatura
estimada fue de 15.14°C y para 1997 de 16.64°C,
lo que representa un incremento de 1.5°C totales
(O.0263°C por año). Cabe señalar que los datos
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