vicios de los bienes durables no se podrían obtener los
precios de los bienes que se producen corrientemente.
En el modelo de Leontief, los servicios de la fuerza de
trabajo tienen que suponerse homogéneos. Una diferen
ciación en la calidad de la mano de obra, conduciría a
que el salario se determinara como parte de las condiciones
de equilibrio de los mercados, y que los precios de los
bienes dependieran de los costos que se fueran obtenien
do por variaciones en la escala de salarios, involucrando
nuevamente las condiciones de la demanda para su de
terminación.
Ahora bien, estas consideraciones apuntan, a la ne
cesidad lógica de manejar un modelo empírico cuyos su
puestos teóricos son muy rígidos y cuya solución
dependería de una enorme desagregación que considera
ra a cada bien como el resultado de un proceso esencial
mente distinto. Empíricamente el modelo no podría ser
construido.
Manejar prácticamente el modelo requiere un nuevo
concepto. Leontief empleó la noción de
sector indus
trial.
Considerando, por lo tanto, un esquema de flujos
expresados en términos monetarios; un sector se compo
ne, de una amplia variedad de bienes físicos agregados
entre sí a través del valor monetario de cada uno de
ellos.
Omitiendo el estudio de productos específicos, la
noción de sector industrial, conduce, además de una
gran simpUficación, a muchas ventajas matemáticas.
Los flujos interindustriales se pueden sumar por hileras
y columnas. Si se sigue la práctica de aplicar índices de
precios, en vez de los precios mismos, los coeficientes
técnicos son números puros que también se pueden agre
gar, permitiéndonos la aplicación de herramientas del
álgebra lineal que simplifican mucho las soluciones. De