1978 hasta 1982, la tendencia se revierte y aumenta la
construcción de obras pesadas. Queda claro que esta si
tuación es reflejo de las coyunturas económicas y políti
cas por las que transitó el país (Fidel, C.
et al,
1983 y
1984).
Es interesante observar que el valor bruto de la pro
ducción total se desagrega en tres componentes.'^
a) Los procesos constructivos llevados a cabo medíante
la autoconstrucción, que significan alrededor del
50%
del total.
b) Los profesionales y técnicos que operan por cuenta
propia y que constituyen alrededor del 13% del total.
c) Las empresas organizadas que se encuentran aso
ciadas en la Cámara Nacional de la Industria de la
Construcción (C.N.I.C.) y que representan el
31%
de la actividad constructora.
Pese a que ta autoconstrucción es un fenómeno muy
generalizado ha sido poco estudiado. No sólo es importan
te por representar alrededor del 50% del volumen cons
truido, sino que también es la única vía que tiene la
población de bajos recursos para acceder a una vivienda.
La autoconstrucción no es una modalidad nueva, viene de
tiempos remotos y es una situación permanente. Esto se
explica fundamentalmente por los bajos ingresos de la ma
yoría de la población, aunado a la existencia de zonas
sociales desatendidas por la acción del Estado.
Hay que anotar que este rubro no sólo comprende a
la construcción de vivienda, además existen otro tipo de
obras: todas aquéllas que no son realizadas por empre
sas constructoras. Como por ejemplo, algunas construc
ciones de PEMEX llevadas a cabo por ella misma.
La autoconstrucción, que no ha sido con t emp l ad^