integración del complejo lácteos como parte importante
del haz de complejos: por una parte en este complejo
aumenta la proporción de sus insumos provenientes del
CAB sobre el total, y por la otra aumenta la proporción
de ventas que realiza al CB, por el incremento en el naci–
miento de becerros machos. Esta integración será anali–
zada en estudios posteriores a fin de observar las modifi–
caciones que provoca sobre la estructura del CG.
Se observa que la complementariedad técnica del
complejo está acompañada por una independencia rela–
tiva en cuanto a las condiciones económicas de la repro–
ducción de los bloques, lo que es reflejo de las condiciones
tecnológicas de la ganadería pastoril, que ha impedido una
penetración importante de los alimentos balanceados en la
dieta de este tipo de ganado. Entre los obstáculos que se
interponen a tal sustitución alimenticia se encuentran las
condiciones fisiológicas del ganado bovino, el que tiene
capacidad de aprovechar una gran cantidad de nutrientes
existentes en la vegetación silvestre, lo que vuelve antieco–
nómica la utilización de alimentos más elaborados. Sin
embargo en el caso del ganado lechero, como se mencionó
anteriormente, si se ha dado la sustitución, aunque por
razones de productividad más que por la engorda que
puedan provocar al animal. Si la crianza de bovinos, ya
sean de carne o de leche, presentara condiciones favo–
rables a una sustitución de forrajes por balanceados, la
fabricación de alimentos para animales se introduciria
cada vez más en el CB, de tal forma que las condiciones
de mercado de ambos complejos (CB y CAB) se relacio-
naria cada vez más estrechamente, lo que extendería la
complementariedad técnica al plano económico y refor–
zaría la posición hegemónica de la clase 2098.