CASOS.SF.XCIl.LOS
/ ) / • ;
Л 7 7 ' Л : 1
Ш
..и
\1)Л
Con
T I
Гт íl<-
(liir
.il 1
(41.tr
im
.I ^ÍIÍUIT.I
miprisinn ilr опт» .uiii.i l i í
Jirilnnkiii
.III
di'
Uit
|»11ъ
<Ц1*'
LI
.i
IH-II
'dadii
I
'l sisii
-III.I
p
.ITL
.init-|ii
,u
¡(I ^ I I
ilrinlici
lomi'in
BRJUOIIMI,
U'
|)i('sc
(ilaii .1 ('rf
(ilimi
:i
>-M
>ii .d^im'is
ÍMSOS
ripirtis |»[i^lii('id
<ts
rn Nurva /.rl
.IIIIJ.I
l-^lán
KKIII
^ rrcugtdn$ dr' iiilifj
m r
.imi.d
di
-I
()mliiid
>III
.in, donde
>r
RXJ
^mr
im чгп-
I r n a r d r CJíirs. r r l Í T i u i i s a dj
^iini^s
HÚIMVIÍ-ÍÍOS
y
d.
J>.II
lami ntos. Modín', di-
I
-Jius
no:»
liicaii 1
.1
riicrda
м
OMI
j
Ie- \U-I
.iliua. [шпрп-
l.ii
I I I I M I U C |J4H]I.ÍII
li
^dirr
4U
(i-didi]
RN RII
:ili
[IMRR
íftro
pais.
'
Supervision de u políc
I
a
Los dmandaries do eslt asun» «an un padre y un
Kf¡
El padre que era unaHo
cargo de la lona, mp^eso srj ¡r^diQojciO^ sot>re la lorma
С0ГТК1
h.ibia ^ido
inlFHc
^^río
S J
IwjQ
pof el jefe tJe policía. En particular se quejaba de cieios comenlanos quehapra hecho
el lele da policía a su hijo
y
oei hectio de que el inieirogaiono hutsera tenido lugai en una
gran 9ala dcxids eslabar^ lrab.i|anda oíros r^rembros del cuerpo que podían oír Iixio íacií-
menta.
O e 5 ^ > de estudiar los archrvos olítales. llegue a ta conclusión de que la policía
tenia motivos si;ficier^ies pata haber mienogado al tiip sobre urta сопШг
;1э
(determinada,
que había levanlarJo sospechas en la polioa, pero de lodos rtiodus consrdarí claramente
tncontdos, lanío los сотепигюь necias pof el jele de policía, como la паюгаЮга se-
mipública del intefrogaiono.
Uns ve! pf««niados mis puntos de insu aldepartamento, «sla leconoao que debería
Ьм«г»е una amonasiatión.
Iníormé a los demandantes do acuerdo con eslo ^ postenomiente reabl una cana da
agradeomientit del padre y del niuctiactio
Confi
N F L I C T O O E I N T E R E S E S
Una (otígíalo profesional se quejd do queel chilar de un ooche
OIICIBI
se habla apio-,
vechsdo de les oponunídades qua le brindaba su poeslo para conseguir un segundo em-
fUeo cwTw íologfalo prolesíoryl •/ vendedor
d e lotogralias.
|»stales y
souvenirs
La quefeílante aducía
r
^ue todo eso llevaba a una compeienüa desleal y dañaba sus
prí
)pios ínlefases. A lo largo de ta investigación, empece a caer en la cuenta de que el
marido de
id
quernflante era
tamiMén
chóter do un coche ortdat y según Iba avanzando mi
investigdolún, me percate de que la mujer del ch6ler contra el que se había dmgído la
i
primera queía, tamoen había preseniado una reclamación coniia las actividades comei-
dales del mando de la querellante
Como resultado da mr inresirgactón, ambos conductores lueron requeridos
por
el Mi–
nisterio donde traíjaiaban (de leirocarniesj que les hiio prometer que abandona/ian esas
aclPíidades
comeiDalss.
cursándose una mst/uocün gonwai en los rrasnws léminos i
loOos los demás oondudotes de turismos.
M Y U O A S AL
DESEMPiEO
La reciamente, que se encontraba ел el paro, se quejaba de que tos tunoonarios de :
la
Mint
local
Ú4
MtiusSitio dt
TrtDaio no
le
ГиЫап proporcionado ta inlormaciOn al res
pecto. eMsoríndole soora suj derechos a oblanet un lubslde de deMinpleo, por loque
tiabia tenido que padecer estrecheces econímlcas.
Cuando plante* sl lema anta el Mmisieño. calen la cuenta de quesehablan producido
mel eniemlidos por ambas partas El ajunio iu« solucionado
y el
Ministerio accedió a re–
comendar ai МшгЯегю de la Segundad Social que hiciese un abono ratrospecirvo que
cutíresa tooo el peiíodo d* desempleo
Asi s« hilo y la ComisiOn de la Segundad Sooal posniioimenia Koidtl «bonaiie el
seguro de desempleo.
La querellante después de recibir la ayuda cwiMdida, vobió a píeseniai una queía,
alegando esta vsi que se le abonaba una ayuda correspondumie sOio
i
una pane de su
penodo de desempleo. Le esplique rjue esta ayuda no so concetJe notmalmenle respecto
a los pnmeros siete dras del perrodo de desempleo y que este peno*) se computa a parar
de ta lecha en que se ha dejado de percibir el salarte, inciurda ta paga de vacaciones
E
XTRANJEROS DEPORTADOS
El Ministro de Emigraciún habla ordenado que fuera deportado un inmigrante, sin los
debidos permisos, que estaba casado con una chica de Nueva Zeianda. ta esposa y ai
padre de ésta recurrieron con todo génem de razonamientos, basados en duras motiva
ciones da tipo personal, después de que resultaron inútiles sus reclamaciones al Ministro.
Como la orden era totalmenle legal de acuerpo con ía íimie poliiica del gabierno, de
cidida personalmente por el mmlsi/o. el lema estaba tuera de mi jurisdicción y lounico que
pooia recomendar a la mujai es que si ella, como oonucuenda de « l a orden, se encon-.
traba en circuislanoas desaslrosas. podía acudir
a
ia olicine local del Mnsleno de
It
Segundad Social
V
IVIENDAS DE PHOTECCIÚN OFICIAL
Esu queja se refería al mal estado en que sa enconiraban otilas viviendas depro-
tecd№ orrcial de una zona residencral. El querellanle alegaba que el mal estado en qu<
se hallaban tai ciiadaa propiedades hacia que sedevaiuasen oirás propiedades de la zona
El depadamento {cia Ferrocarnles) me comunicó que se haliian tromprado esas caaa)
en la misma operaaOn en que se hablan adquindo unos terrenos que se rban a Oeslinaf
a los lar.DcarTítes pero no para que se constmyeran allí viviondaj de enipJnados Cuando
se compraron, ya eran casas muyantiguas yan estado de njlna que sehuluesen demolido,
a no sar porque habla grari escaseí de viviendas. La mayoría de estas casas se alquilaron
con la adveriencra de que se trataba de un arrandamienio -resiringido., comprometién
dose los ocupantes a su manienrmiento
Debido al hect» de que s« debían demjir esas viviendas en el p4aio da unos anos
para que pasase el Iren por esos terrenos, el Departamento estimd que no compensalu:
econdmcamenle su remodelaciún, aunque en ese momento acepta hacer algunas tepa-
raciones menores y revocar la lachada, e informó a los inquilinos que tenían la obligaiaóft
de maniener las viviendas limpias y aseadas, de lonna que se lograse un rajonabie nnrel
de buena aparianda esterna
Por mí parte, comuniqué esta inlomiadón a los reclamantes.