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la expresión indígena fuera reduciéndose con el paso
del tiempo en los siglos XVI al XVIII. La integridad de
las técnicas de tradición indígena en la representa-
ción cartográfica fue interrumpida con la conquista,
la dominación y el control español, que entre otras
cosas, se puso de manifiesto en el desarrollo de la
cartografía en el Nuevo Mundo con normas, códigos
y patrones de representación europea.
Uno de los métodos más aceptados para reali-
zar un análisis morfológico es la observación de pla-
nos antiguos relacionando la evolución del espacio
con factores políticos, económicos, sociales y oro-
gráficos, entre otros (Conzen, 1960). Los mapas o
planos no explican por sí mismos las razones de los
cambios con el paso del tiempo. Es remarcable que
la cartografía producida en Mesoamérica demuestre
hasta hoy en día una concepción cultural de gran ri-
queza y diversidad, en los mapas sobrevivientes se
unen el espacio y el tiempo donde la marcha de días
y ciclos en la historia humana no cesa, un criterio
clave para redefinir el concepto de lo que se percibe
actualmente como mapa. Asimismo, de la informa-
ción que un mapa debe brindar para facilitar el aná-
lisis del espacio.
Hacia el final del siglo XV y durante el siglo XVI
la producción cartográfica europea en el nuevo con-
tinente llevó otros derroteros, que con el devenir del
tiempo habrían de coincidir en mesoamérica, en la
región del Golfo de México. Después de las famo-
sas bulas alejandrinas y lo que se conocería como El
Tratado de Tordesillas (7 de Junio 1494) que provo-
caron la escisión del mundo, a Inglaterra, Holanda y
Francia no les quedaría más que actuar como los hi-
jos desheredados de las Cristiandad Católica, de tal
manera disputarían los dominios de la Corona Espa-
ñola y Portuguesa, y el principal interés en los siglos
subsecuentes fue el de hacerse de la Flota de Indias
y de los territorios y las riquezas del Nuevo Mundo.
Las figuras de piratas, corsarios y fili-busteros, que
antes navegaban por el mediterranéo también se
reprodujeron en el Océano Atlántico y representan
íconos en la historia de América.
Los planos de arquitectura y urbanismo militar:
Europa y Nueva España
Los planos objeto de este estudio que se presentan
a través de dos ejemplares de corpus urbanísticos
(2009 y 2010) son un testimonio gráfico del intento
por resolver o contener parte de este conflicto en el
Golfo de México, en la resolución del conflicto euro-
peo en tierras americanas radicaba su gran impor-
tancia. Esta gran producción cartográfica representa
en su mayoría fortificaciones en ciudades y cons-
trucciones militares que se proyectaron con el fin de
tener un mejor control de las riquezas y recursos
naturales de esta zona del territorio americano. Era
inevitable que la Corona española decidiera invertir
fuertes sumas de economía en murallas y fortifica-
ciones para las principales ciudades y también para
construir obras menores con el objetivo de proteger
lugares costeros y rutas marítimas.
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