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En estas investigaciones, la propia ciudad sigue siendo en pri–
mer término un espacio ya construido. Si bien es cierto que Rogers
y Vertovec acentúan la importancia de la localidad, geograPhy of the
settingo geograPhy ofthe place (Rogersj Vertovec, 1995:14), allí tam–
bién el espacio urbano forma una superficie en la que tienen lugar
una serie de acontecimientos. Una etnología de la ciudad, en el
sentido de las investigaciones etnográficas de lo urbano y de la cons–
trucción del espacio urbano concreto que le sirve de base -en rela–
ción con la configuración, la organización y la idea de ciudad-, ha
sido, sin embargo, desatendida hasta ahora'
Desde la década de 1980 existe en México, sobre todo en las cien–
cias sociales y culturales, un interés creciente y orientado a la práctI–
ca por el estudio de la ciudad. En sus trabajos empíricos, y guiados
por el principio temático de "los espacios de lo urbano" , los investi–
gadores mexicanos intentan llevar a cabo un análisis de las realidades
urbanas en el contexto de las atribuciones del significado simbólico
y de la interpretación de modelos de organización social (ef Aguilar,
1992; Safa, 1992; Carda Canclini, 1998). Dentro de los estudios ur–
banos, concebidos de una manera interdisciplinaria, existen varios
temas centrales de investigación tales como el análisis de procesos
urbanos históricos (Cf Cisneros, 1993; Lira, 1995; Rodríguez Kuri,
1996), de estructuras políticas en relación con conceptos de aprove–
chamiento social del espacio (Cf Coloumbj Duhau, 1993; Schteingart,
1991), así como la investigación de construcciones de identidad en
el espacio urbano (ef Tamayo, 1999). En relación con una investiga–
ción etnográfica de lo urbano, es preciso mencionar ante todo algu–
nos trabajos empíricos sobre la construcción simbólica de la ciudad
(el Carda Canclini, 1998; Reguillo Cruz, 1999). Rossana Reguillo, por
ejemplo, a partir de las consecuencias de una dramática explosión
3 La complejidad, la aparente disolución de los límites y la creciente fugacidad
de las unidades de estudio, dificultan la labor de los culturólogos a la hora de
ocuparse del espacio urbano concreto (Cf Welz, 1997). Las discusiones acerca de la
fragmentación de estructuras urbanas han llegado hasta la proclamación de la de–
cadencia o la desaparición de la ciudad material, a favor de lugares descentraliza–
dos e incluso virtuales (Cf Flusser, 1992).
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