El abasto
de
medicamentos
en
México
Figura 2
Modelo Convencional (ideal)
Uciución
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D istribución
Suministro
flujo de información
(i)
... - - - - - - flujo de medicamentos (m)
deficiente o la distribución desacertada, por ejemplo, abren la posibilidad de que
el
surtimiento a los pacientes no se realice en forma completa u oportuna. El costo
económico que significa
el
exceso de claves en los almacenes y la consecuente ele–
vada caducidad es igualmente importante, pues termina por afectar el gasto total
destinado a la adquisición de estos iPsumos.
Adicionalmente, la falta de asignación de responsabilidades y
la
escasa espe–
cialización en el manejo de las distintas etapas pueden traducirse en pérdidas eco–
nómicas e ineficiencias organizativas, que indudablemente influyen en la capacidad
de entrega de medicamentos a los pacientes.
La
corrupción, o la simple falta de
transparencia, poseen además un impacto extraordinario sobre la efectividad de la
cadena. A pesar de estos problemas, es probable sin embargo que la conservación
de
la
responsabilidad de la
CAM
en los funcionarios de las instituciones públicas
tenga ventajas sobre la subrogación, como se verá más adelante.
El modelo tercerizado puro
(M1),
por su parte, se compone de menos fases
que el
Me,
al asignar una parte de la cadena a un tercero, encargado de distribuir
los medicamentos hasta los puntos de atención para su entrega a los pacientes.
Naturalmente, en este caso los
SESA
conservan bajo su responsabilidad las fases de
planeación y financiamiento, pero descargan en una o varias empresas la tarea de
almacenar y distribuir los medicamentos hasta los centrOS de atención. Un esquema
simplificado de esta modalidad de abasto se presenta en la figura 3.
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1...,65,66,67,68,69,70,71,72,73,74 76,77,78,79,80,81,82,83,84,85,...173