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conservación que, además, se compone de varios
sistemas construidos en distintas épocas y regiones.
También sobresalen los hechos históricos de que en
gran proporción, estos sistemas fueron construidos
con mano de obra esclavizada y tremendamente ex-
plotada, y que la muralla no sólo sirvió para prevenir
la entrada de invasores sino también para controlar
la salida de civiles locales. De tal manera que, si bien
la Muralla representa un gran logro de ingeniería, su
historia más amplia no es realmente apreciada cuan-
do se vista dicho tramo.
Efectivamente, en los múltiples tramos de la
Muralla existen tramos más antiguos que dan cuen-
ta de que inicialmente la muralla estaba construida
en tierra apisonada; el tramo cerca de Pekín (Bada-
ling) adecuado para el enorme flujo de visitantes (no
sólo extranjeros sino sobre todo chinos), presenta el
atractivo sistema construido durante la Dinastía Ming,
es decir muy reciente. Dicho sistema utiliza piedra en
la base y algunos otros sitios, pero está recubierta
sobre todo con un tipo grande de ladrillo gris que le
confiere una gran presencia y elegancia, aunque es
muy probable que el interior de la estructura sea de
tierra apisonada. El sitio cuenta con una buena in-
fraestructura para los turistas y la apariencia del tra-
mo que se visita es ejemplar, aunque en términos de
criterio de conservación excesivo. Dicho tramo tiene
unos cuantos kilómetros y existen otros, pero si se
piensa que el conjunto de murallas que existen al-
canza 7000 km, entonces podríamos suponer que no
es posible conservar de igual forma su totalidad y, en
efecto, una gran parte está olvidada y en peligro de
desaparecer. Para asegurar su existencia se requie-
re de proyecto completo pero, la realidad, es que no
existe ni siquiera un registro completo de los distintos
sistemas que conforman este gran monumento.
Una parte poco conocida de la muralla, y que
se encuentra en gran peligro de destrucción, es el
su parte occidental, donde se relaciona a la Ruta de
la Seda. Ahí la Gran Muralla presenta una hechura
en tierra apisonada y es parte del patrimonio de di-
cha Ruta. Pero existen ciudades con cintas murarías
construidas de forma similar que representan intere-
santes ejemplos de lo hasta aquí reseñado. A conti-
nuación presentamos dos casos.
Dos ejemplos sobresalientes
de arquitectura militar en la Ruta de la Seda
Existen dos sitios arqueológicos de escala urbana li-
gados a la Ruta de la Seda en su paso por la Región
Autónoma de Xinjiang que, como lo señalamos, es la
sección china más occidental. Se trata de los restos
de las ciudades de Goachang y Jiaohe que, por su
construcción totalmente en tierra, son ejemplos ex-
traordinarios que muestran las posibilidades de uso
de este material en la antigüedad
Las ciudades de Goachang y Jiaohe.
Las ruinas de Goachang se ubican en uno de las
regiones más inhóspitas del desierto, en la depre-
sión de Turfan que puede alcanzar 100 m bajo el
nivel del mar, por lo que la temperatura en fácilmente
alcanza los 50 grados centígrados en verano, y los
inviernos son igualmente duros. Empero, se fundó
hacia el siglo I a. C. durante la dinastía Han (206
a.C.-219 d.C.), por la necesidad de establecer un
puesto militar, como muchas otros sitios de la región,
para dar seguridad al comercio de la Ruta de la Seda
y consolidar el dominio chino en esa comarca. Even-
tualmente se convirtió en la capital de un pequeño
reino y prosperó. Aunque se conoce poco de la his-
toria de la ciudad, muchas crónicas antiguas hacen
importantes referencias que poco a poco van escla-
reciendo su devenir. Por ejemplo, en la ciudad había
Vista del gran monasterio budista
en la ciudad de Goachang.