Utico para la obtención de recursos; у las dos unio
nes tendrían a su cargo la gestión social de los pro–
yectos.
Dentro de este marco organizativo, las dos lí–
neas fundamentales de acción adoptadas fueron la
captación de recursos para el desarrollo de progra–
mas de vivienda y la extensión de la organización
vecinal. Paralelamente la UVCG entró en conversa–
ciones con otras uniones en la perspectiva dc con–
formar una instancia de coordinación, iniciativa que
culminó en la constitución de la CUD .
A l igual que la UPNT, la UVCG sostuvo una
presencia importante en el seguimiento inicial del
PRHP, logrando sustituir a los empleados y militan–
tes del P b l en el levantamiento del censo socio–
económico realizado por el organismo, así como en
la entrega dc los "Certificados" diseñados para
acreditar la calidad de "damnificados". La impor–
tancia de este logro radicó en que ambas activida–
des se consfituyeron en instrumentos importantes
de la lucha por la organización y el control de las
vecindades establecida entre el partido oficial y las
En lo que respecta a la concreción de su pro–
grama de reconstrucción, la UVCG recibió inicial-
mente ofrecimientos de apoyo por parte de diver–
sos grupos profesionales, sin embargo la pretensión
de Casa y Ciudad de exclusividad en cl apoyo técni–
co, desalentó esas iniciativas. La magnitud del pro–
grama resultó, por otra parte, menor que la plan–
teada inieialmenie; en total 8 predios y 172 vivien–
das, eon recursos proporcionados en un 90 % por
Catholic Relief Service.
La U P I CM - PM se constituyó en septiembre dc
1985 a partir de la fusión de la Unión Popular de
Inquilinos de la Colonia Morelos, organización que
contaba con siete años dc existencia y ¡a Peña Mo–
relos, organización que contaba con una trayectoria
de nueve años. La primera se habia dedicado fun–
damentalmente a la asesoría en cuestiones de inqui–
linato (desalojos, juicios dc desaucio), y la segunda
había desarrollado actividades dc promoción cultu–
ral.
La U P I CM - PM se planteó como punto de par–
tida la lucha por la reconstrucción, perspectiva que
en la actualidad se ha ampliado a la problemática
del inquilinato, el desempleo y otros problemas so–
ciales como los dc la prostitución y la drogadicción.
Desde el punto de vista organizativo, la unión
adoptó dc inmediato la forma de asociación civil a
fin de poder abordar las tareas de la reconstruc–
ción, Desde el punto de vista reivindicativo y políti–
co, al igual que las otras uniones promotoras de la
CUD , la UPICM-PM levantó como demandas in–
mediatas una recontrucción democrática y el respe–
to al arraigo de la población damnificada.
Como organización promotora de programas
de vivienda, la unión desarrolló proyectos en 14 ve–
cindades con un tolal aproximado de 300 viviendas,
contando con el apoyo técnico de Casa y Ciudad.
En este plano, como ocurrió lambién con la U V C D
y la UVCG , enfrentó las dificultades de la compe–
tencia con el programa oficial y debió replantear su
esquema inicial de trabajo. En términos de la cana–
lización y administración de recursos ha operado
con el mismo esquema que la UVCD , organización
con la cual, como se ha señalado, compartió el es–
pacio de PASE,
Actualmente, la línea fundamental de acción de
la UPICM-PM pasa por la cuestión inquilinaria y
participa en la Asamblea de Barrios, una instancia
en la que han convergido recientemente un buen
número de uniones.
Campamentos Unidos nació en octubre de
1985 a partir de tres vecindades de la Colonia Gue–
rrero que habían organizado un campamento en la
vía pública. Como unión de vecinos, esta organiza–
ción participó en las movilizaciones de los damnifi–
cados pero, a diferencia de las anteriores, no ha
participado orgánicamente en la CUD , En general
se podría afirmar que Campamentos Unidos ha de–
sarrollado una acción dirigida fundamentalmente a
la problemática habitacional en el marco de un in–
tenso trabajo dc base, dentro de una línea de ac–
ción independiente del Eslado y de sus programas.
En lo que respecta a la reconstrucción, Campa–
mentos Unidos presentó inieialmenie 12 proyectos
propios para su financiamiento por RHP, pero se
negó a aceptar las condiciones técnicas, de gestión
y crediticias manejadas por dicho organismo, op–
tando entonces por una línea de acción inde–
pendiente. Dentro dc este marco había concretado
hacia fines de 1987, 13 proyectos, con un total de
184 viviendas, finaneiados fundamentalmente por la