Página 386 - Coordinación de Servicios de Información

3. L O S I N T E R L O C U T O R E S N O G U B E R N A M E N –
T A L E S .
Eo la inlroduccióo al capíiulo prccedenít he
mos señalado como uno dc los tres tipos de condi–
ciones generales que enmarcaron las actividades de
las O N G aportadoras de recurs<is, las característi–
cas y modalidades de operación de sus interlocuto–
res no gubernamentales: asociaciones civiles y orga–
nizaciones y grupos de damnificados. En el presen–
te capítulo comenzaremos por presentar una breve
caracterización de estos interlocutores, que han
operado como ima pieza clave en la concreción de
los programas no gubernamentales de reconslruc
ción, para abordar después, en los capítulos 4 y 5.
el análisis de las principales modalidades de gestión
y participación social que estuvieron presentes en
dichos programas.
3.¡. AstHiaiiones civilexy gnifHís asesores
Anles de la ocurrencia de los sismos eídstía un
grupo relativamente reducido de asociaciones civi–
les vinculadas con la promoción, gestión y produc
ción de la vivienda popular y, en general, con la
problemática urbana. Producidos los sismos, la
eclosión det movimiento de damnificados y el papel
activo que jugaron diversos sectores y grupos socia–
les en la atención del desastre y en el desarrollo de
iniciativas vinculadas con la reconstrucción, consti–
tuyeron la condición propicia para que diversos
grupos de profesionales formalizaran su participa–
ción a través de la conformación de nuevas asocia–
ciones civiles u operaran, sin constituirse en asocia–
ciones, desarrollando un papel activo en vincula–
ción con las organizaciones sociales. Este último
fue sobre todo el caso de muthos profesores e in–
vestigadores universitarios que se constituyeron co–
mo núcleos de apoyo a las iniciativas populares a
partir dc los centros de estudio e investigación dc
los que provenían.
Sería imposible aquí presentar una semblanza
de todos y cada de estos grupos y asociaciones civi–
les, por lo cual nos limitaremos a presentar aque–
llos que por su trayectoria, por su influencia en la
orientación seguida por la acción no gubernamental
y por su vinculación con los principales programas
no gubernamentales de reconslrucción, han jugado
un papel más relevante.
3.1.1. Las asociaciones civiles con una trayec–
toria anterior a los sismos
Dentro de esto grupo las cuairo que de acuer–
do con la información rccojida, tuvieron un papel
más destacado han sido cl Institiilo de Vivienda
Enlomo y Desarrollo del Sector Social ( V I D E C O ) .
el Cenlro Operacional de Vivienda y Poblamiento
(COPEVI), Casa y Ciudad y el Instiluto de Comu–
nicación y Educación Popular ( I C E P AC ) .
V I DE CO es un organismo de vivienda que, dc
acuerdo con su director, el Arq. Octavio Mariscal,
aún cuando no había sido protocolizado notarial-
menle, contaba ya en 1985 con una trayectoria de
18 años. Sus actividades se iniciaron a través de la
vinculación dc O. Mariscal con un grupo dc líderes
de mercados populares y cooperativistas para quie–
nes, dc manera informal, comenzó a elaborar pro–
yectos dc vivienda. En 1984 V l D E t X ) .se ctmstituyc
formalmente como asociación civil dedicada a aten–
der la vivienda del "sector social"'; obreros, campe–
sinos, no asalariados, de algunas organizaciones dc
burócratas. Durante cl período precédeme O. Ma–
riscal ocupó en ffirma intermitcnic diversos puestos
como funcionario público, pero desde 1984 no ha
regresado a ocupar puestos en cl gobierno.
La concepción que ha orientado a V I D E CO en
el campo de la vivienda popular cs la existencia de
un camino alternativo para el desarrollo de progra–
mas de vivienda a los correspondientes a los orga–
nismos y mecanismos oficiales y a las empresas in-
mobiharias y constructoras. Genéricamente O. Ma–
riscal denomina a esta alternativa la de la "autoges–
tión", por la cual entiende el hechit de que los mis–
mos usuarios :inle un problema determinado se or–
ganicen para resolverlo, ayudados o apoyados por
algún cuerpo lécnico.
El Arq. Mariscal había sido ampliamente cono–
cido en ci medio de las organizaciones populares y
las asociaciones civiles vinculadas a la problemática
de la vivienda popular, por su participación como
funcionario público en un controvertido programa
de regeneración urbana, cl "Plan Tcpito" (Véase
Coulomb, 1984). En la actualidad, aunque rescata
un conjunto dc aciertos de dicho plan, afirma que
"...en una atlilud utópica había planteado un pro–
grama de regeneración urbana donde había olvida–
do la calle planteando arrazar con lodo".