y de la infraestructura y los servicios comunes (cis–
terna, alumbrado, áreas verdes, patio, etc.)
De modo que en principio no debe considerar–
se a la persistencia de la organización vecinal origi–
nal como un indicador evidente dc la capacidad ad–
quirida para enfrentar colectivamente los proble–
mas comunitarios. De hecho, considerando algunas
impresiones recojidas entre funcionarios de organi–
zaciones donantes, integrantes de asociaciones civi–
les promotoras y dirigentes de organizaciones veci–
nales, la cuestión de la participación vecinal presen–
ta algunos matices difíciles de captar a través de
ima encuesta.
Entre los funcionarios de organizaciones do–
nantes entrevistados, por ejemplo, predomina la vi–
sión de que los altos grados de participación alcan–
zados en la realización de los prc^amas de vivien–
da, contaban con un estímulo lo suficientemente
poderoso -la obtención de una vivienda propia- co–
mo para que no deban ser confundidos con una ac–
titud generalizada y Iransferiblc a otras cuestiones y
circunstancias, para la participación en la gestión
colectiva de problemas comunitarios:
Creo que una cuestión bien importante que ha
faltado en las organizaciones populares, es un
proceso de concicntización de la base social.
Creo que el punto de atracción fue la vivienda.
El problema es que una vez que se ha entrega–
do la vivienda es muy difícil mantener el interés
en la organización popular.
Hay un aspecto que es interesante destacar en
relación con el carácter de las personas del lla–
mado "sector popular". Su mentalidad posee
aspectos muy típicos. Poseen un individualismo
casi amoral que se asemeja a la idea del "bene–
ficio limitado".
Hemos visto que los beneficiarios han creado
conflictos por cosas que no merecían ser objeto
de conflicto. La asignación de una vivienda
más grande a una familia más grande, podía
dar lugar a alegatos interminables por parte dc
otra que recibió una vivienda más pequeña pe–
ro que es una familia más pequeña.
Otro pimto interesante es que había una rela–
ción
inversa entre avance de la obra y entusias–
mo. A l inicio gran entusiasmo. Una vez casi
terminada la vivienda, la apatía, la actitud
de
preguntar plañideramente: ¿señor fulano de
tal,
cuándo nos van a entregar la casa?.
Los grupos de vecinos funcionaron muy bien
como promotores de vivienda, sus funciones
fueron muy importantes en ese sentido. Pero
una vez obtenida la vivienda enfrenlan serios
problemas. Tienen que dar el salto de recono–
cer que se acabó el juguete de promotor de vi–
vienda y ahora se enfrentan al régimen de con–
dominio. Ese salto no lo están dando facilmen–
te. Tenemos un año de cobranza de las cuotas
y estamos dispuestos a regresarles el dinero si
proponen proyectos para utilizarlos adecuada–
mente; pero salvo dos o tres grupos, los demás
no han propuesto nada. Hubo casos en los que
sobraron accesorias, la idea era donárselas pa–
ra el uso comunitario, pero no han podido
abrir ni una sóla. No saben lo que tienen que
hacer. El uso comunitario los desconcierta.
Los vecinos son influidos por todo el mundo y
se manipulan entre ellos. Se mueven hacia
donde sopla el viento. Están siempre a la ex–
pectativa de agarrarte en un error. No hay ni
ha habido, en este caso, afiliación alguna a una
organización de damnificados. Cuando reciben
a alguien lo hacen para ver que pueden obte–
ner.
Por su parte, tos profesionales que actuaron en
programas no gubernamentales de vivienda en su
carácter de integrantes de una organización ejecu–
tora, se enfrentaron en ocasiones a beneficiarios
enormemente exigentes y que de modo más formal
que real se encontraban integrados a una organiza–
ción social;
El primer proyecto que Íbamos a empezar, el
día anterior se
dio
vuelta la votación (de los ve–
cinos) y se pasaron a Renovación. La gente es–
tuvo oscilando entre una u otra alternativa.
Primero se agarraban a nosotros que coatába–
mos con ciertos recursos, pero después tenían
a Renovación. Además nosotros tratábamos de
implantar la participación y la gente nos decía
"oigan no, los de Renovación no participan,
porque nosotros vamos a participar, además
ustedes tienen la obligación
de
entregarnos tas