produdan sus mercandas unelerlslicas, en su mayo.
,fa, de la misma manen en
1860
que
en
1750,
aunque
en eanlklades muy superiores y
c:oo
d
l.l$O
de nuevas
fuentes de energfa. Por lo lanto, lo que tenemos que
upliear no
es sólo
d &Sanso de Binnin¡bam con sus
subdivididas indu5trias anesanates, sino espedricamen·
!l'
el asc;enso de Manc;hester con su, f'bric;as, porque
tueron Manchesler y SU5 .Imllares
las
que
revo11.lCiona·
ron al mundo. ¿Cu"es fueron
1.,
eondlc;;one. que, en
el slalo
X\'II,
ayudaron no wlo a quitar del paso los
('bst'eulos generales sino tamblt!n a oriainar las cond!–
ciones que dieron nacimiento a Manchester?
Seria sorprendente de!ICUbrir que las condiciones pan
d desarrollo de la moderna economla Industrial sur–
Rieron por todas panes en la Europa de
los
, islas
XVII
'!
XY111,
Lo que debemos demostnlr .,. que, como resul·
u'.do de los cambios
del
s¡¡lo
XVII,
ellas se desarrollaron
en una o dos
:wnas
lo suficieotemente
&randes
y
lo
suficientemente eficaces económicamente
como
pan.
ser–
vi,. de base a
una
posterior n:voluci6n mWJdial. Esto
u muy
d ificil.
OuiÚJI
no sea posible bIocer ninauna
~emoltración
definitiva hasta tanlo
poseamos
mi.s
in–
fonoación <;:uantila tlva que la que tenemos
ac:tuabnen–
te. Ello es mb dificil aún porque en la. 'reu
mi.s
• Itales
de
la economla - la de la producción .....fcola
y
manufaelurera propia mente dicha_ no sólo sabemos
rluy
poco
sino care«mos ademb de aquellos hitos que
,..Iientan al historiador de la Revolución Industrial en
11,1 eamino: talleres
d<I
hilado., tdares
~,
ferro–
carriles. Por lo tanto, d historiador de
la
economla
Of" nuestro
periodo puede.
lener
la
fuerte Impresión de
que
H
en cierto momento. hacia la mllad del siglo XVII,
la vida europea se Iransfonn6 tan
complet~te
en
muchos de sus aspectos que tendemos en
~neraJ
a
ccnsldenu' • ese momento como \lila
de
las
an,ttdes
vertientes
de
la historia moderna- U. No obstante, DO
¡:U«te probarla fehacientemente.
' 1 G. N. CIarlr:,
~
......
,~
c•...,...,.
J,
IJ[,
239
El siglo XVII. ipoca
d e
concentración económica
El tema principal de este artkulo
~e
ser resumid..
cumo si¡:ue:
La
crisis del si&lo
XIII
<lerh'ó ..n una
co'"
side...ble conc:entraeión del poder económico. En esto
timen:. M'gún creo, de la del ';alo
X\"I
que
tuvo
-al
menos por un liempo...- un erecto
Op~to.
Este hecho
puede Indicar que l. a nt;aua e"",et"ra de la sociedad
europea ya habla sido considerablemente minada, pues·
to que puede araumenta rse que la lendencia normal
de una sociedad
pu....
mente feudal, al hallar$e en dlfi·
c.ultades, consiste en l'OI\'er a una economía
de
peque·
ftos productores locales -por
e~mpJo
campesinos- cu–
yo
modo de producción sobrel';"e Ucilmente
.1
col:>pso
de una elaborada superestructu.... de comerdo y agri–
eullura de propietarios
.~.
Directa e indirectamente,
uta eoneentración sirvió a los fines dc la futura indus–
triaJizadón aunque. naluralmenle, nadie
se
lo babl",
propuesto. Los sirvió direelamente por medio del foro
talecimiento de la industri", "a domiclllo
H
,
a c.'Cpensas de
la producelón a rteu.nal. y de
¡.,
economfas "avanzadas"
, «pen..s de las "",traudas", y por
medio
de la ace·
leración del proceso de acumulación del capital. Indi.
¡«lamente, contribuyendo a soludonar el problema de
obtener un c"c.:cdente de productos a"riCOlas, y I",mbién
oc
Ol,..s maneras. Por supuesto.
no se
trató de un pro–
~IQ
a Jo Pangloss. en el cual lodo aconlecf", para bien,
m el mejor de los mundos, Muchos de los resultados
de
la
crisis fueron mero derroche o hasla retroceso, s;
se los e"amina
desde
el punto
de
"Ista de una e"entual
revolución induslrial. Ni tampoco e51e proceso fue
Inevitable. a corlo plato. Si la Re" olución ' ndUSlrial
hubiese fransado, <:ORlO fracasal'tln tanlas otras
re\'O–
luc:kJoes en el siglo 1(\'11, es muy probable que
el
deu·
rroUo ecol"lÓmico se hubieM' retardado mucho. No
obs–
tante, .u efecto neto fue econ6mieamente proaruistL
A pesar dc que esla aeneraliu.el6n --como todas lu
~ralizac¡ones-
puede ser discutida, es c",si induda·