como el aprovechamiento del suelo, los precios de los terrenos y el
mercado inmobiliario, las redes centrales de las instituciones financie–
ras, económicas y culturales o los fluj os diarios de vehículos de los
habitantes de la ciudad. En su análisis el investigador comprueba cómo
el sistema urbano de México dejó hace tiempo de estar marcado por
el antiguo Centro Histórico, y cómo desde la década de 1980 se han
formado ejes de centralidad que se extienden hasta la periferia de la
ciudad. Él habla de una vasta red de ejes subordinados a jerarquías
territoriales y funcionales
(ibid. ).
Los nuevos centros funcionales en la
ciudad de México son, por tanto, lugares que asumen funciones de un
eSD
o de un polo tecnológico, por ejemplo el Paseo de la Reforma, los
barrios Polanco y Santa Fe o los territorios urbanizados a partir de la
construcción de ejes viales como Insurgentes Sur y Periférico.
El gran proyecto de Santa Fe , construido en la década de 1990, es
un ejemplo de esta concepción de nuevos centros independientes.
Su in fraestructura, orientada a las necesidades de trabajo y consu–
mo de la clase media alta y ¡¡¡ue incluye complejos de oficinas, alma–
cenes,
shopPing mal/s
y un cJhtro privado de altos estudios, la Univer–
sidad Iberoamericana, ilustrt.. muy bien cómo la periferia urbana se
transforma por medio de una urbanización planificada, asumiendo
cada vez más funciones de una nueva centralidad. Con ello, sectores de
la periferia pasan a ser espacios de centralidad propios y bien deli–
mitados (Terrazas, 2000:2).'
Tendencias similares pueden constatarse en relación con el
equipamiento cultural de la ciudad. En una investigación sobre la
distribución de los lugares de consumo cultural en la ciudad de Méxi–
co se puso de manifiesto, por ejemplo, que el crecimiento de la ciudad
2
La elección
del lugar
para Santa Fe hace alusión a otro significado:
el
centro
de oficinas
y
de negocios se erigió sobre antiguos basure ros, superponiéndose de
ese modo a aquellas capas urbanas connotadas, entre otras cosas, por la basura
y
la
marginalidad. Esta fonna de revaJoración simbólica tiene su continuidad en la
estnc·
La separación espacia] de Santa Fe de las OlfaS zonas urbanas adyaccmcs, así como en
las reguladas posibilidades de acceso
al
lugar.
(Para la urbanización de esta zona se
consuuyó un túnel
y
una autopista de peaje que la une con
Las
Lomas.) A través de
esta exclusión social
y
de la selección
del lugar,
el complejo de edificios se manifiesta
como un enclave del primer mundo en medio del tercer mundo.
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1...,252,253,254,255,256,257,258,259,260,261 263,264,265,266,267,268,269,270,271,272,...306