tradicionales; ... no asilos (exclusivamente) tradicionales, de los que cada barrio tiene un determinado
número de oficiales·;20-4 lo cual explica el férreo control del cacique chamula.
Por otro lado se reconoce que "los cargos tradicionales son un tanto rechazados, pocas son las
.personas que desean servir a su pueblo. Sólo los puestos de presidente, regidores o jueces son bien
aceptados, ... en cambio a lo que toca a los tradicionales, que cada ario se cambia, su elección
nombramiento y toma de posesión es muy laboriosa, dificil podriamos decir... _,205 olvidándose el
autor, una vez más, que el indigena tzotzil chamula no aceptar estos cargos por la pesada carga
económica que esto supone, además, que provoca und espiral de endeudamiento que cada
vez
implican varios al"los para poder cubrirlas.
El propio autor seriala que "(comúnmente los que no quieren tener cargos de ayuntamiento se
esconden (sic) en las fincas o tierra caliente hasta que termine el peligro (sic) de ser elegido)"?l6
Además de que
~Ios
pasados oficiales ya sólo piensan en regresar a sus parajes a trabajar para poder
devolver las deudas que haya contraIdo durante el ejercicio de sus funciones... K207
En la investigación se ha sostenido que la asignación de "cargos" aparece como una imposición de las
autoridades, las cuales por medio del presidente municipal son quien "elige" al tzotzil que deberá
cumplirlos. Por otro lado, se ha dado cuenta que este proceso sin ser aceptado por la comunidad , no
existe la posibilidad de evadirlo so pena de ser multado, encarcelado y expulsado de la comunidad.
As! para la selección y asignación de cargo religiosos, "El presidente municipal es quien toma la
iniciativa... , se hace en secreto en la casa del primer alcalde en donde solo entran las autoridades".206
Este proceso confirma lo autoritario de las autoridades chamulas, incluso se ha prestado a querellas
por venganza, para no pagar deudas, para impedir la disidencia y sobre todo, para poder ocupar
porciones mayores de tierras: aqul sigue operando el "dedazo" del presidencialismo en México, salvo
que aqul no es muy bien aceptado por el "elegido",
Sin embargo, los hechos para el autor, parecen no existir en su análisis ni mucho menos en sus
afirmaciones, dado que todas las expulsiones por motivos religiosos prácticamente no figuran en las
tradiciones chamulas. "El que ya ha recibido su nombram iento y acepto gustoso (sic) el cargo, ese
mismo dlas tendré que venir.. al pueblo a conseguir su casa ... La persona que no tiene casa en la
cabecera municipal tiene que conseguirla ... cerca del Centro Crvico-Retigioso". Asimismo, "cuando
ZOoI
Ibld.,
p. 105.
~Ib{d.
20(1
{bId.,
p. 107.
201
Ibrd.,
p.
125.
2011
rbid.,
p.
106.
227
1...,228,229,230,231,232,233,234,235,236,237 239,240,241,242,243,244,245,246,247,248,...442