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tan los medios impresos. La fachada de la Catedral, en sus múltiples
variantes, es un motivo frecuente de tarjetas postales. A veces mues–
tra un apariencia amablemente seductora, la parte inferior de la reja
ha sido hábilmente engalanada con macetones de flores que en la
vida real apenas llaman la atención; otras veces aparece iluminada
por la luz del atardecer como una valiosa joya de oro wn el cielo
oscuro de fondo. En otra postal, el ángulo frontal de la fotografía
subraya la magnificencia del edificio a la luz del día.
Revisando el archivo fotográfico del diario La Jornada, se puso
en evidencia que la Catedral es también considerada por la prensa
uno de los puntos de referencia principales del Zócalo' Además de
la documentación sobre acontecimientos particulares como mani–
festaciones , reuniones o visitas presidenciales, existen imágenes casi
diarias de situaciones cotidianas en el Zócalo. A veces se ve una gran
multitud; otras solamente una pareja sola, abrazada estrechamente.
La plaza siempre muestra un aspecto diferente, con tribunas, guir–
naldas de adorno o tiendas de campaña. La foto de unos niños que
blanden sonrientes pequeñas sombrillas de plástico, o la de unas
jóvenes arrodilladas que restriegan ropa en una tabla de lavar, co–
bran una significación específica cuando detrás puede verse un frag–
mento de la Catedral. En el mismo centro del poder de la ciudad, las
sonrisas de los niños irradian ligereza, y hasta las oblicuas torres de
la Catedral pierden su aura a veces sombría y cobran cierto aspecto
socarrón. Por otra parte, la cotidiana imagen de unas mujeres lavan–
do, tan común en México, adquiere a la vista de las torres de la Cate–
dral cierta connotación incriminadora. Aquí, en el mismo corazón
de la ciudad, hay personas viviendo bajo toldos de plástico. Esas
personas luchan por que se respeten sus demandas, y para ello tras–
ladan su situación cotidiana hasta un lugar público de la metrópoli
(ef capítulo n, 6). Además de esas situaciones cotidianas, otro motivo
frecuente en la prensa son las grandes concentraciones, cuando por
, En el archivo, las fotos del periodo 1985·1996 (después de esa fecha introdu·
jeron el procesamiento digital de imágenes) estaban ordenadas temáticamente.
Me concentré en revisar sobre todo aquellas fotografías clasificadas bajo los epí–
grafes "Zócalo", "Manifestaciones" y "Centro Histórico".
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