tos funciones y características fundamentales que necesariamente deberán
estar presentes en el entorno futuro.17
16. Seminario sobre Comunica
ción y Diseño. UAM, 1976. Ch.
Jencks, M Baird, El Significado
en la Arquitectura. Ed. Blume,
Madrid, 1975. Varios autores, La
arquitectura como semiótica. Ed.
Nueva Visión, Buenos Aires
1970.
17. A. Tzoniz, op. cit.. pág. 15. J.
Antuñano, Dato Formal en el
Contexto UAM, 1976, 2.3.3. D.
Prieto, Codificación, Decodifica
ción y Recodificación, UAM
1976.
18. M. Golfinger, Villages in the
sun, Mediterranean Community
Architecture, Lnud Humpries
London, 1969, E. Alien y Stone
Stelters. The sense of Unity, Chi
cago 1972.
19. A. Tzoniz, op. cit., pág. 15.
"Otro argumento en contra de la
aceptación de un sistema de re
solución de problemas (problem
solving) como principio organiza
dor del entorno construido por el
hombre, es que sus tácticas de
optimización sirven a estrategias
cuya selección es siempre un
acto de represión y sumisión hu
mana, sin importar las variablesV
20.
Varios autores han analizado
los diversos impactos que tienen
y han tenido, los entornos dise
ñados sobre ciertas comunida
des; véase: C.' Perin. With man
in mind, Mit. Press, Cambridge.
1970, en la pág. 135; muestra
una tabla acerca de las propie
dades del entorno o medio am
biente. que el diseñador puede
afectar. (Ya traducido. UAM,
1976).
4.3.1.4
Indeterminación
L a imagen que el diseñador tiene a través de la observación del entorno so
bre el que actuará es determinante para sus futuras acciones. Es por esto
preciso que esa imagen se acerque a la veracidad de lo observado, lo cual
en última instancia es imposible, pues por definición la imagen o sustituto re
produce
algunos
aspectos de lo que pretende representar. Sin embargo, si
los aspectos básicos son olvidados en esa imagen previa, seguramente és
tos
no
aparecerán en las Hipótesis. La adecuación de la imagen construida
con la realidad cultural constituye lo medular de las hipótesis que pueda for
mar el diseñador. Esta adecuación permite que se actúe, diseñando, sin vio
lentar el equilibrio de ese entorno. Este equilibrio
no es universal,
sino
cultural. Por lo tanto, el diseño debe preservar el equilibrio en sistemas que
pueden ser a menudo heterogéneos o desequilibrados, pero no se trata de
equilibrar a toda costa, lo que importa es que no se violenten sistemas pro
pios y auténticos de vida.
Para que esta adecuación sea productiva, es preciso que permita cierto gra
do de indeterminación o de azar dentro de los sistemas funcionales del entor
no. Si se hace un análisis, por cierto faltante en México, de los entornos de
ciertas culturas, se puede observar que casi todas ellas no son homogéneas
y sin embargo su diseño muestra una asombrosa homogeneidad formal den
tro de su heterogeneidad cultural.18 Debe aclararse enfáticamente que consi
derar al diseño sólo como una actividad de resolución de problemas por
medio de formas, es claramente ideológico y oculta el hecho de que el entor
no del cual surgen no puede ser considerado bajo patrones de "optimización"
que en definitiva reprimen y someten.19
4.3.1.5
Síntesis e Impacto del Diseño
Para su hipótesis, el diseñador está obligado a realizar un trabajo monodisci-
plinario, por lo que debe tener un especial cuidado en conocer el impacto que
tendrá lo diseñado por él en el medio ambiente.20 Para esto es necesario te
ner una apertura en la aceptación de requerimientos que son difícilmente dé
tectables como los antropológicos y los sociales, y que son aún más
importantes que las funciones físicas.
126