Cuadro 3.6 Producto Interno Bruto per capita
Año
PIB
total
Per capita
Tasa anual real
1982
-0.5
-2.9
1983
-5.3,-7.3
1984
3.7
1.4
1985
2.7
0.5
1986
3.0
_
1986-1981
-2.7
-
Fuente:
INEGI,
Cuentas Nacionales de México,
varios años.
Como puede apreciarse, la economía mexicana
perdió su ritmo histórico de crecimiento y, durante
ese periodo, operó una redistribución factorial que
benefició a quienes perciben ingresos distintos al
salario; lo anterior se explica, al menos parcialmen–
te, con los datos arrojados por la Encuesta Nacional
de Empleo Urbano, del
INEGI,
de acuerdo con la
cual en el área metropolitana de la ciudad de
México la proporción de asalariados dentro de la
PEA
pasó del 82.5% en 1982 a un 76.9% en 1985, y
se conformó ima tendencia que prevalece y se
expresa también en las otras dos zonas metropoli–
tanas donde se capta esta información. La explica–
ción complementaria corre por cuenta de la debi–
lidad del crecimiento del empleo, así como de la
brutal caída de los salarios reales, hija de las incli–
naciones regresivas de la política oficial correspon–
diente. De todo ello resulta que, en 1986, el salario
mínimo retrocedió a la cuantía real de 1961, para
Cuadro S.7 Comportamiento salarial
Año
Remuneración
Excedente
a los asalariados de explotación
Estructura porcentual (%)
1976
43.5
1977
42.2
-
1978
41.1
-
1979
41.1
-
1980
39.3
-
1981
36.1
-
1982
35.8
48.6
1983
28.8
55.1
1984
27.7
56.5
regresar aiín más en el tiempo y corresponder, en
1988, al de 1940.
Por su parte, los salarios medios (corresponden
al sector formal, a los salarios medios de cotización
del
IMSS
y cubren alrededor de siete millones de
asegurados en cerca de 400 mil empresas del sector
privado), tuvieron un mayor crecimiento que los
mínimos durante el breve auge de 1978-1981, para
caer de manera más acelerada que éstos durante el
resto del periodo (1984-1988):
Cuadro 3.8 Evolución del salario mínimo
Año
Salario mínimo y medio
Salario mínimo
Variación anual real
(%)
Salario medio
1978
-1.4
-1.8
1979
-1.4
-0.2
1980
-7.0
-3.0
1981
L l
2.9
1982
0.0
1.4
1984
-22.0
-24.8
1985
-9.0
-12.8
1986
-1.2
-1.3
Fuente:
Norma Samaniego, "Los efectos de la crisis de 1982-1986 en
las condiciones de \ida de la población en México", mimeo.
CEPAL 1986 V Clemente Ruis D..
op. cit.,
p. 7.
Fuente:
CNSM e IMSS. dcfariados con los índices nacionales de precios
al consumidor del Banco de México.
Por otro lado, el "excedente de explotación",
rubro que cobija una alta heterogeneidad de facto–
res productivos que se ubican igual en la cúspide
que en la base de la pirámide social, incrementó su
participación en el
PIB,
de 49% en 1981 a 56.5% en
1984. La ampliación de la desigualdad social, que
es evidente, conduce a suponer que en este rubro
se verificó también una ampliación de las diferen–
cias sociales, y que la variación en importancia en
la estructura del
PIB
correspondió al incremento de
las ganancias de los propietarios de mucho mayor
manera que a la remuneración de quienes trabajan
por su cuenta. Igualmente, dentro del grupo de
propietarios debe diferenciarse entre grandes, me–
dianas y pequeñas empresas, con base en la presun–
ción de que fueron las primeras, así como los
rentistas, los más beneficiados con la redistribución
factorial que se menciona.
En apoyo de las ideas anteriores debe recono–
cerse la fuerte expansión del subempleo y de la
marginalidad urbana durante este periodo -y co–
mo resultado de la crisis-, hechos que conducen a