¡. . . I /а
libertad en las organizaciones económicas es ensiuna
parte de libertad en términos generales, así que la libertad
económica es un fin en sí mismo.
{. . .] la libertad política llego con el mercado libre y el desa–
rrollo de las instituciones capitalistas.
¡. . . I
consideramos primero el mercado, como componente
directo de la libertad, y luego la relación indirecta entre las or–
ganizaciones de mercado y la libertad política.
"Sólo hay dos maneras de coordinar ¡as actividades económi–
cas de millones de personas. Una es la dirección central, que
implica el uso de ¡a fuerza (la técnica del ejército y de¡ Estado
totalitario moderno). La otra es la cooperación uoluntaria de
los individuos (la técnica de¡ mercado).
"La posibilidad de coordinación mediante la cooperación vo–
luntaria se basa en la proposición elemental de que en una
transacción económica ambas partes se benefician, con tal
que la transacción sea voluntaria e informada bilateralmente.
"El modelo que funciona en una sociedad, organizada sobre la
base del intercambio voluntario, es una economía de inter–
cambio con libre empresa privada (lo que hemos venido Hu–
mando el capitalismo
competitivo!.
"Mientras se mantenga la libertad efectiva de intercambio, la
característica central de la actividad económica con la organi–
zación de mercado, es que impide que (en la mayoría de ¡as
actividades) las personas interfieran unas con otras. El consu–
midor está protegido contra la fuerza de uno de los vendedo–
res con los que puede tratar. El vendedor está protegido con–
tra la fuerza de un consumidor, porque hay otros consumido–
res a los que se puede vender. El empleado está protegido
contra ¡a fuerza del patrón, porque puede trabajar para otros
patrones, etc. Y el mercado hace esta labor sin necesidad
de tener una autoridad centralizada.
"Por otra parte, ¡a
gran ventaja del mercado
es que permite
una amplia diversidad.
Es, en términos políticos, un sistema
de representación proporcional.
Todo hombre puede (por así
decirlo) votar por el color de corbata que le guste, y obtener–
la; no tiene que ver qué color le gusta a la mayoría y some–
terse a ella, si es que él está en la minoría
[. . . i A este aspecto
del mercado es al que nos referimos cuando decimos que el
mercado trae la libertad económica
\ . . .]La libertad política
significa que ningún hombre ejerce la fuerza sobre el resto de
los hombres
[, . . | Al hacer que la autoridad política pierda el
control de la actividad económica, el mercado elimina esta
fuente de poder coercitivo.
Hace que la fuerza económica
actúe de contención del poder político, y no de refuerzo.
"Para que la defensa del capitalismo tenga algún significado,
sus proponentes deben poder financiar su causa [. . .] Enla so–
ciedad capitalista, lo único que hace falta es convencer a unas
cuantas personas adineradas para que den fondos para lanzar
una idea, por extraña que sea, y siempre hay personas así
(muchos foccs independientes de financiamiento). "
Sobre la distribución del ingreso: salarios, precios, utilidades^
"El principio ético que directamente justificaría la distribu–
ción de la renta en una sociedad libre de mercado es el si–
guiente:
A cada uno, según lo que el y los instrumentos que
él posee producen.*
"Habiendo competencia entre patronos y empleados, no pa–
rece haber razón para que ¡os patronos no puedan ofrecer Ubre-
mente a los empleados las condiciones que les parezcan.
"La distribución de la renta es aitn uno de los campos en que
el Estado ha causado más daño con algunas de sus medidas,
de lo que ha podido compensar con otras.
\. . .]el impuesto sobre la rentacon una escali tan ascendente
es un serio impedimento al uso eficiente de nuestros recursos.
"Los controles de precios, tanto si son voluntarios como im–
puestos por ley, sise cumplen eficazmente, üevarán fina¡men-
te a la destrucción dei sistema de libre empresa y a sustituirla
En
contrapoiijcióii a U m á x i m a marxisLa: a cada uno según su necesidad,
a cada u n o según su capacidad.