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gente del INAH, protestaron y nos impidieron continuar trabajando
en el Zócalo. Cerramos la zanja con concreto y tuvimos que suspen–
der los trabajos de la línea 8 (entrevista con Delgado Gamboa, 22 de
abril de 1997).
Según Delgado Gamboa las actuales planchas de concreto de
diferente color que hoy se ven en la plaza son pequeñas"cicatrices"
que recuerdan los planos para una nueva línea del Metro, pero re–
cuerdan sobre todo los conflictos con el INAH, que es la institución
encargada de velar por los tesoros históricos del centro.
Con el INAH, que en su condición de administrador del patrimonio
cultural mexicano también vela por la historia del Centro
Histórico, entra finalmente otro significativo grupo de interés en la
ronda de los que deciden sobre e! Zócalo." Desde un inicio el INAH
vio con preocupación la construcción del Metro y se opuso tajante–
mente a una segunda obra, pues ésta pondría en peligro los tesoros
soterrados y los edificios circundantes. Sin prestar atención a las
propuestas de solución de lCA y del STe , que se comprometieron a
realizarproyectos de investigación detallados y a fortalecer la protec–
ción de los monumentos, el INAH protestó tan enérgicamente
contra e! proyecto que pudo impedir la construcción de una segunda
línea del Metro en el Centro Histórico de la ciudad de México
(entrevista con López Morales, 11 de noviembre de 1997).
Incluso en un aspecto tan nimio como e! de! diseño exterior de la
estación de! Metro, el INAH hizo uso también de su derecho de
intervención. Las entradas y salidas de la estación Zócalo tenían que
22 Desde principios de la década de 1970, el INAH administra la herencia
arqueológica e histórica de México y es una de las instituciones más poderosas
de la ciudad. Entre 1972 y 1974 se llevaron a cabo varias definiciones y proyectos
de ley para identificar y proteger monumentos arqueológicos e históricos en el
territorio mexicano. Según afinnaciones del arquitecto López Morales, representan–
te del INAH, aunque la institución no tiene en definitiva ningunajurisdicción ejecu–
tiva, gracias a su gran labor de cabildeo ejerce una influencia enorme en
todas las medidas constructivas que se acometen en las zonas identificadas como
patrimoniales en todo el territorio de la ciudad. En los trabajos de construcción,
los proyectistas y ejecutores están subordinados a sus severas regulaciones (entrevis–
ta con López Morales, 11 de noviembre de 1997).
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